La decisión sobre el módulo espacial asignado fue sectorizar el baño y le dormitorio mediante un cambio de altura del cielorraso e integrar el espacio por medio de un plano veritcal de mármol que recorre el ambiente en toda su longitud.
De acuerdo al programa requerido por organizadores de la exposición se desarrollaron las áreas de estar, comedor y cocian. La caja recibió un tratamiento superficial, donde placas de distintos materiales y superficies iluminadas se combinan.
Una antigua propiedad en el puerto fue reciclada para vivienda de un arquitecto. Se utilizó el hormigón armado para todos los elementos nuevos y permanentes: núcleo central de escaleras, ascensores y plenos de instalaciones, el piso superior.
En el Poble Nou en un antiguo edificio industrial de ladrillo rehabilitado, la arquitecta realizó su propia vivienda; un espacio diáfano y flexible. Para aprovechar mejor la superficie se agregó un altillo que ocupa la mitad de la planta, donde se ubicaron el dormitorio, el vestidor y un baño.
Departamento en un piso 49 sobre la 5ğ Avenida que reproduce un ambiente iluminado y con armonía espacial, pensado para que los clientes disfruten su estadía en la Gran Manzana.
El loft se ubica en un antiguo edificio en el barrio de Palermo, que funcionó como frigorífico y fue rehabilitado para albergar varias unidades de vivienda. Para conservar la identidad edilicia se recuperó la estructura industrial metálica.
En un taller mecánico abandonado con una vivienda en el primer piso, se implantó este estudio de fotografía, cuya particularidad se centra en que cada ambiente está concebido como un escenario distinto y su cubierta parabólica traslúcida puede oscurecerse mediante un sistema eléctrico de paneles corredizos.
Esta pequeña vivienda-estudio, para una diseñadora de modas, ubicada en una calle bulliciosa de la caótica ciudad brasilera, responde a un programa compacto, que se abre hacia el interior -un patio organziado por un muro de piedra y un árbol-.
En un penthouse existente, se transformaron todos los interiores en plantas libres y se incorporó un entrepiso para alojar el programa de una vivienda y una importante colección de libros y objetos.
Este espacio de 80m² y doble altura, que formó parte de la exposición de 2004, fue concebido para un usuario que requería de un espacio de trabajo incorporado a la vivienda. El proyecto se realizó sobre una planta rectangular que incluía una pared curva y un techo de losas escalonadas que fueron cubiertas por un revestimiento de madera.
El espacio de intervención es un prisma rectangular, con ventanas en los lados cortos; por lo tanto uno de los objetivos primordiales fue traer luz natural hacia el interior. Se trabajó con paneles traslúcidos y móviles que favorecen la flexibilidad espacial.
Este loft se sitúa en la planta baja de una fábrica de principios de siglo XX rehabilitada recientemente como edificio de viviendas. Se resuelve como un ambiente único, de techos altos, muros de ladrillo y pilares y vigas de hierro que refuerzan el carácter fabril del edificio.