El centro aloja obras de tres pintores en galerías excavadas en lo alto de una colina. El hormigón que da forma a un recorrido entre salas de exposición y patios ajardinados está pensado como sostén para que la vegetación crezca y oculte los muros.
El conjunto, integrado por un volúmen existente y cuatro nuevos que alojan vivienda de autoridades, casa del guarda, oficinas administrativas y viviendas para el resto del personal, se materializa en hormigón visto teñido del mismo color que la tierra del lugar.
El programa, oficinas para alquiler, se resuelve en una torre en forma de trébol en cuyo centro se localizan tres núcleos de circulación vertical que son la espina dorsal del edificio.
El proyecto, que forma parte de una regeneración general de la zona dónde se localiza, triplica en superficie al antiguo y propone una superposición funcional, que queda oculta tras una piel vidriada indiferenciada. El nuevo edificio se concibe como un volúmen simple de vidrio, cuyos diferentes niveles de transparencia varían en función de los usos.
En la antigua localización de una refinería de petróleo, se instaló este conjunto ferial, organizado en torno a un eje circulatorio y de servicios de 1.5km, a cuyos lados se ubican ocho pabellones de exposición y un centro de convenciones. Una de las particularidades del mismo, es la cubierta del espacio central, realizada en vidrio laminado.
El edificio aloja, durante la fiesta de la cerveza que se realiza en la ciudad, dependencias de policía, primeros auxilios, administración del festival, oficina de Cruz Roja, brigada de incendios, objetos perdidos y centro para la juventud. La particularidad de su uso esporádico motivó la resolución material de un volúmen cerrado completamente revestido con láminas de cobre.
Sede central de la empresa de relojes que integra, en un edificio de apariencia compacta, revestido por planchas de acero inoxidable, los talleres de producción y las oficinas de gestión y marketing,
La iglesia, que ocupa el solar en el que se asentaba una capilla del siglo XVIII, se construye íntegramente en madera respetando la técnica constructiva tradicional de la zona y utilizando materiales locales.
El programa, uan sala de ensayos para la banda local, se resuelve en un volúmen exento, revestido interior y exteriormente por paneles de madera que incorporan protección térmica y aislación acústica.
La decisión de dividir el programa funcionalmente en dos plantas, materializadas con diferentes técnicas, se tomó para resolver la construcción por separado acortando los plazos de obra.
Un edificio-patio de cinco niveles asume la escala del peatón y se materializa en ladrillo; hacia el sector del río una torre de piedra de 15 niveles, configura la entrada al campus.
Un volúmen compacto y cerrado, responde a un entorno periférico, respetando la tradición local en cuánto a la materialidad: todo la envolvente se resuelve con piezas cerámicas de grandes dimensiones.
El recinto español, un prisma de 18x18x9 m., se organiza en torno a un patio en torno al cual se ubican los espacios expositivos. La característica más relevante es la envolvente, una celosía de piezas hexagonales de cerámica.
La casa de hormigón se ancla en la ladera, se minimizan los huecos laterales y el espacio principal se estira a través de un gran voladizo que se funde con el bosque.
La ampliación del edificio existente se decide para acoger la vivienda de dos familias. El nuevo volúmen se adhiere al antiguo y las funciones se independizan mediante cerramientos de vidrio que cualifican las relaciones entre espacios.
Esta casa de invitados se basa en la idea de los mobile-home: se resuelve a partir de uan estructura de perfiles de aluminio y se reviste con paneles de aluminio y zinc. Este prototipo sirvió también para alojar otras funciones.
La vivienda se asienta en una parcela de fuerte pendiente. La resolución estructural de perfiles de acero, hace que le volúmen se separe del terreno y la caja resultante se envuelve de madera.
La complejidad de la parcela dónde se localiza la vivienda, se refleja en el interior dónde la cubierta se rompe en planos inclinados de hormigón y luz cenital.