Se aborda la revalorización como tendencia que se dio a partir del año 2000 de edificios diseñados y construidos luego de la Segunda Guerra Mundial en Brasil. Este fenómeno supuso un público que no solo supo encontrar las ventajas de vivir en un departamento de cuarenta años de antigüedad desde una sensibilidad estética, y a su vez, enfrentar las posibles dificultades del deterioro ocasionado por el paso del tiempo. Se desarrollan los siguientes ejemplos: Edificio Prudencia, Andrade Morettin, 2001. Edificio Lausanne, Apiacás, 2012 y Edificio Louveira, AR Arquitetos, 2009.
