El nombre de la casa no alude sólo al resultado formal de la cubierta sino al concepto estructural que la estabiliza: dos bloques alineados en los extremos contrapesando el techo, resulatdo formal de copiar la parábola de la catenaria correspondiente. El programa se resuelve en una primera caja mono espacial de 70 m² cubiertos, con un bloque cerrado de servicio articulando el gran espacio. El resto del programa es un espacio intermedio, cocina y estar tipo quincho, ambas partes relacionadas por una puerta vidriada basculante que permite unificar el espacio.