La particularidad de esta vivienda, para una familia de tres miembros situada en un barrio residencial de la ciudad, es su volumen horadado por huecos. Las paredes, los techos y los suelos están completamente perforados y maclados tridimensionalmente. Empleando un orden geométrico y materiales artificiales, la sucesión de vacíos concatenados genera un mayor campo de relaciones recíprocas.