Paul Vaillant-Couturier, fundador del Partido Comunista francés, siendo intendente de Villejuif, convocó a un arquitecto con quien compartía ideología para construír una escuela primaria en una zona periférica de la ciudad. El proyecto respondió a un lenguaje moderno: hormigón, cemento visto, ventanas corridas y terraza jardín. Actualmente el edificio figura en el listado de obras patrimoniales y será rehabilitado en 2011.