Ubicado en un polígono de 100 mil metros cuadrados, el Parc del Baix constituye un intento por equilibrar territorialmente la región complemnetando las funciones de vivienda, industria y comerio con otro tipo de equipamiento. El equipamiento deportivo y lúdico Ribera-Serrallo Cornellà de Llobregat se desarrolla a partir de la continuidad espacial, un recorrido encadena los distintos espacios articulando esos contenedores que representan el repertorio formal del arquitecto portugués.